sábado, 7 de mayo de 2011

6 - CLASIFICACION DEL FUEGO:

A estas alturas ya somos capaces de comprender muchas cosas del fuego, ya no es un mito casi mágico y por ello podemos enfrentarlo desde el sentido común.
De todas formas debemos conocer una clasificación más que nos ayudará a catalogar el fuego potencial o efectivo frente al que nos encontramos, tomando así decisiones mas correctas.
Cuando conversamos con personas versadas en la prevención de incendios, llega a nuestras manos un escrito referente al tema o curioseamos en la etiqueta de un extintor, es casi seguro que nos encontraremos frases como “fuegos tipo A” o “extintores tipo ABC”; estas clasificaciones se refieren a los elementos involucrados en el fuego, sean los materiales combustibles o características a tener presentes a la hora de intervenir.   Aunque existe almenos otra clasificación usaremos la aconsejada por la NFPA.



Vamos a ver a que nos referimos.


FUEGOS TIPO A:
Son los más comunes, en los que el material combustible mas significativo es sólido y no tiende a cambiar de estado por el efecto del calor, por ejemplo maderas, telas, papeles. Suelen producir residuos, brasas o cenizas.



FUEGOS TIPO B:
Aquellos en los que se encuentran involucrados materiales combustibles líquidos, gaseosos o que pueden licuarse por efecto del calor, por ejemplo ceras, barnices, gasolinas, muchos plásticos,propano,etc.
A diferencia de los fuegos tipo “A” no dejan residuos significativos.
Téngase presente que los líquidos chorrean y por tanto pueden cambiar de lugar, extendiendo con ellos el fuego de un sitio a otro, caso contrario a los sólidos que permanecerán inmóviles aunque puedan trasmitir el incendio a otros materiales cercanos utilizando los métodos ya comentados anteriormente.
 



FUEGOS TIPO C:

Corresponderían a esta clasificación los fuegos en los que hay presencia eléctrica independientemente del material combustible involucrado.
 


FUEGOS TIPO D:
Fuegos muy poco comunes, corresponde a virutas de metales livianos combustibles o reactivos como el sodio, magnesio, aluminio, etc.
Estos metales arden a altas temperaturas, y exhalan suficiente oxigeno para mantener la combustión; deben manejarse con suma cautela.


FUEGOS TIPO K:
Ultimamente se ha diferenciado un nuevo tipo para aquellos fuegos que se producen en cocinas, por lo general por combustión de grasas, muy relacionados con el tipo “B”.






Y…. ¿para que me sirve esta clasificación?.
Vamos a un caso práctico, estamos en nuestra casa y en la cocina se prende una sartén, nosotros que somos muy dispuestos cogemos el jarrón de agua  de la mesa de la cocina y…… Probablemente, al realizar esta acción extenderemos el fuego por toda la cocina y seguramente acabaremos con quemaduras muy graves *observa el video de que puede pasar.

        Otro caso al subir a nuestro apartamento comprobamos que del armario de los contadores eléctricos sale una humareda muy espesa de olor muy característico, con la agilidad que nos caracteriza cogemos el balde de agua de fregar la escalera y……  Probablemente, la primera víctima seremos nosotros que moriremos por electrocución.   En todos estos casos falló la calificación adecuada del fuego y por ello escogimos un medio de extinción totalmente inadecuado pagando un caro precio por nuestro error.
                Mas adelante relacionaremos los tipos de fuego con sus correspondientes agentes extintores según su conveniencia.

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